Ojo Vago

La ambliopía u “ojo vago” se produce cuando se manifiesta una disminución de la agudeza visual por falta de desarrollo de la visión de un ojo. En la mayoría de los casos se inicia en niños y afecta aproximadamente a un 4% de la población.

La visión se desarrolla durante el periodo de crecimiento de los niños y lo hace hasta los 10 años. Después de esa edad la capacidad de mejorar la visión es ya muy improbable.

Si durante este período de desarrollo visual sucede alguna alteración en el ojo, la capacidad visual del ojo afectado no solo se detiene sino que decrece .

En una visión correcta, los ojos y el cerebro trabajan conjuntamente. Esto quiere decir que el cerebro recibe las imágenes proyectadas por cada uno de los ojos y las fusiona como una imagen única y clara. Si las imágenes que recibe el cerebro por parte de cada uno de los ojos son diferentes, el cerebro anula una de ellas para no ver doble, favoreciendo el desarrollo de la visión del mejor ojo y dejando el otro como el ojo vago.

Una de las causas de la ambliopía es el estrabismo, pues el mal alineamiento de un ojo no permite que los dos trabajen juntos. Otra causa son los defectos refractivos como la hipermetropía, la miopía y el astigmatismo. También una diferencia grande de dioptrías entre un ojo y otro (anisometropía) puede derivar en una ambliopía. Por último y aunque menos frecuentemente la catarata congénita y las lesiones en la córnea pueden ser también otra causa de la ambliopía.

El tratamiento es la oclusión del ojo sano con los famosos “parches”. Tapando el ojo sano conseguiremos que el “ojo vago” se esfuerce por desarrollarse correctamente.